domingo, 10 de febrero de 2013

Introducción


Foto de Benito Ch Diaz Barrera
"El señor  Frick tenía una extraña forma de hablar que no respetaba ninguna regla gramatical, y solía hacerse un lío cuando trataba de expresar sus ideas. Estoy segura de que aquello no tenía nada que ver con su capacidad intelectual, sino simplemente con que palabras le creaban problemas, tenía dificultades para pronunciarlas y a veces tropezaba con ellas como si fuesen objetivos materiales, verdaderas piedras que obstruían su boca"

Desobediencia intelectual nace con ganas de reivindicar un pensamiento libre, intentando alejarse de la sobreinformación de nuestros medios de comunicación, para dejar las cosas claras. Hablo de desobediencia porque trato de desvincularme del pensamiento reinante entre las sociedades modernas, digamos la oveja negra del rebaño. Y digo intelectual puesto que intentaré no facilitar la información, no pretendo acercársela a las mentes distraídas, esto es lo que hay, para todo lo demás ya tenéis la caja tonta.

Porque  “introduciendo el momento”, bueno pues cada semana intentaré introducir un momento diferente, con el cual yo he conseguido saciar mi espíritu.  Os introduciré en el cine, en la comida, y de vez en cuando me atreveré a criticar el mundo que nos rodea. Intentaré introducir una filosofía de vida que cuando miró a mí alrededor parece haberse perdido.

En este momento, creo que la concepción de la vida está mal planteada. Los caminos marcados desde que naces hasta que mueres beben de la infelicidad, y la sociedad tampoco busca la felicidad de sus ciudadanos, ni el bien común. Bebemos del egoísmo, del egocentrismo, y del individualismo, sin entender que somos una raza, no una persona, y somos un mundo no muchos países.







El dinero por encima de todo. Por encima de las vidas humanas, por encima de las condiciones laborales, por encima de las necesidades básicas, debido a la globalización, y el aumento de la competencia entre unos y otros. La desregulación laboral solo es la respuesta a la competencia salvaje de países como China, donde sus trabajadores se dejan la vida por cuatro perras y pretenden que el resto de países trabajen al mismo ritmo. Individualmente, sacrificamos toda nuestra vida, nuestros deseos, e inquietudes, por una hipoteca, por seguridad económica. Pero entonces, ¿dónde queda la vida?





2 comentarios:

  1. ¡Qué bonita iniciativa Samuel! Me encanta el nombre del blog y tu primera entrada. ¿Dónde está la vida? Sin duda en las personas, y en las relaciones verdaderas que somos capaces de generar y mantener. Somos jóvenes: creemos nuestra propia realidad :)

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  2. Hola Samu. Buena primera entrada. Entiendo bien lo que dices en cuanto a buscar un punto de vista crítico. Te deseo lo mejor para tu travesía bloguera.

    Un saludo

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